De esos momentos en los que no sabes como contestar, ni si quiera como reaccionar, de esos momentos, como este ahora mismo. Se quedó detenidamente mirando los ojos, y yo los suyos. Odio las mariposas en mi estómago cada vez que me quedo mirando detenidamente sus ojos y el mira los mios. Estaba demasiado cerca de mi, notaba como su respiración chocaba en mi cara y el olor tan rico que desprendía siempre. No sabía que decir, ni como contestar, ni si quiera que sentía por él. Ojala lo supiera. Entonces alguien me llamó por mi teléfono, dios vendiga a esa persona. Mire a Justin y luego fui a coger el teléfono, noté a Justin suspirar
Era mi madre, diciéndome que pasaría la semana entera en casa de los abuelos con Ryan, mi hermanito pequeño. Suspiré, me despedí y colgé. Volví a mirar a Justin
-Te vas a ir?
-Si quieres que me quede a dormir contigo y… - le interrumpí
-Puedes irte, bieber
-Venga, si estas deseando que me quede contigo
-Hoy no, ni nunca – río, dios su risa.
-Algún día _______, algún día me pedirás que me quede a tu lado siempre y que nunca me vaya – le miré detenidamente a los ojos. Algo me decía que tenía razón
-He dicho que ni hoy ni nunca – el volvió a reír y después le abrí la puerta. Me miró de arriba abajo y después se lamió los labios. Le cerré la puerta y oí como al otro lado de la puerta oía un “Buenas noches princesa” reí y le grité un “Piérdete Bieber” oí su risa y después no volví a oir nada más.
La una y media de la madrugada, estaba sola en casa y no podía dormir. No conseguía sacarme al niñato ese de la cabeza. Suspiré dos o tres veces, recibí un mensaje de Vane : Mañana tienes el día libre. Recuerda que el Miercoles tienes ensayo por la mañana del tour y por la tarde tienes que asistir a los TCA’s. Buscate un acompañante, o mejor, invita a Bieber. Al terminar de leer el mensaje reí, Enserio creía que iba a invitarlo? Ni aunque fuera el último ser humano en la tierra
Nuevo día, 9 y media de la mañana, Los rayos de sol se cuelan por mi ventana y me dan de lleno en los ojos. Me froto los ojos y suelto un pequeño gruñido. Día libre.*Llamada entrante de Tito Scooter* descolgé.
-Tengo el día libre, así que no me pides que vaya a ver al imbécil ese – noté su risa desde el altavoz del teléfono
-Solo quiero que vengas a mi casa, voy a organizar una comida y Vane y Beyonce van a venir
-Comida de negocios?
-Venga _____, tengo piscina. Además, no estás obligada a besar a Justin
Al final acabé cediendo. Me puse el bikini y ropa cómoda. Sé que va a ir Justin y como sé que a él le gusta jugar conmigo diciéndome que me quiere, yo también voy a empezar a jugar con él. A partir de ahora, querido Bieber, el que se va a ver obligado a enamorarse de mi vas a ser tú.
Llegué a casa del tío Braun. Le saludé. No me apetecía estar con los demás y que empezaran a realizar comentarios sobre la supuesta relación entre Justin y yo. Así que esquivé totalmente el tema y me fui a la piscina sola. Me eché un poco de crema para protegerme del sol y me metí de cabeza en la piscina mientras dejaba llevarme por el agua para que ella se llevara todos mis pensamientos
Salí a la superficie después de bucear un poco, solté el aire y me eché mi pelo a un lado mientras miraba el sol, hacía un tiempo precioso hoy. De repente noté unas manos en mi cintura
-No puedes ir provocándome de esa forma siendo tan sexy en bikini – para mi sorpresa era Justin
-Estaba intentando esquivarte, que haces en la piscina? – el río. Llevaba un bañador azul de cuadros con el torso descubierto. Dios, tenía un cuerpo increíble. Desvíe la mirada al instante, no quería que el dijera nada
-Quería estar con mi novia. Recuerda, delante de todos ellos tu y yo somos novios – Salí de la piscina y me tapé con la toalla para ponerme en una hamaca cerca de la piscina. En seguida vi como Justin estaba en el borde de la piscina
-Venga, báñate un poco más conmigo
-Ni loca Bieber
-Quieres entrar por las buenas o por las malas?
-Por ninguna de las dos
-Eso me da a entender que por las malas – salió de la piscina. Dios, el agua chorreando de su cuerpo, todo su pelo mojado y esa sonrisa que tanto me encantaba, todo en conjunto, conseguía matarme
-Como se te ocurra tocarme mojado… - me interrumpió
-Que me vas a hacer, señorita _____? – dijo acercándose peligroso cada vez más y más a mi
-Cosas malas, muy malas – el río mientras no paraba de acercarse a mi
-No tengo miedo. Me quieres demasiado como para hacerme algo malo
-O es al revés? Porque el que ha dicho que me quiere has sido tú – noté como se ruborizaba. Sonreí victoriosa y me levanté de la hamaca para empezar a acercarme a él. Quería juego? Pues lo iba a tener
-Yo quererte? Demasiado – dijo con una sonrisa
-No te creo para nada, sé que te gusta jugar, y no voy a caer. Es más, quien vas a caer eres tú
-Yo? Enamorarme de ti? – asentí, el empezó a reir. Se acercó peligrosamente a mi y me cogió de la cintura, me estremecí y se acercó a mi oído – Si supieras todo lo que no sabes, no hablarías – me separé bruscamente de él
-Que dejes de jugar conmigo Justin, que no vas a conseguir nada – otra vez empezó a acercarse a mi, yo estaba tocando prácticamente el borde de la piscina. De momento, me iba ganando
-Y si no quiero jugar contigo? Y si te quiero de verdad pero no me crees?
-Demasiada coincidencia todo…
-Y si me dejas demostrártelo? – me dijo ya prácticamente rozando mis labios. Miré detrás mia, caer a la piscina era seguro si intentaba apartarme. Mierda, me tenía totalmente atrapada
-Demostrarme qué?
-Que te quiero
Punto muerto, de no retorno de o pasa o pasa. De no poder evitar algo, de que sabes que tiene que pasar si o si. De que sus labios van a rozar los mios de nuevo, aunque pretenda evitarlo, es imposible. Pero _____, vuelve al mundo real. Sonreí y me acercé a su oído
-De momento vas ganando, ahora estaremos en empate – me acerqué a sus labios tentándolo a besarme. Oh, esto iba a ser divertido. Sonreí, me giré y con un leve empujón lo tiré al agua. Empecé a reir como una niña pequeña mientras el estaba en el agua. Me miró con mala cara y me tiró con él. Le hice una aguadilla y él nadó detrás mia mientras intentaba huir. Me cogió de la cintura y empezó a acerme cosquillas. Le rogaba que parase, pero el no paraba de hacerme cosquillas. Es curioso que hasta debajo del agua tenga cosquillas.
-Por favor Bieber, para – dije mientras no paraba de reír
-Solo si me das un beso – le miré con mala cara, el me sonrío
-Justin, mi amooooooooor! – una voz femenina nos interrumpió. Me separé de Justin, el miró a la chica, salió de la piscina y corrió a abrazarla. “MI AMOR?” Claro que había estado jugando conmigo todo este tiempo, y esto era la prueba
Era mi madre, diciéndome que pasaría la semana entera en casa de los abuelos con Ryan, mi hermanito pequeño. Suspiré, me despedí y colgé. Volví a mirar a Justin
-Te vas a ir?
-Si quieres que me quede a dormir contigo y… - le interrumpí
-Puedes irte, bieber
-Venga, si estas deseando que me quede contigo
-Hoy no, ni nunca – río, dios su risa.
-Algún día _______, algún día me pedirás que me quede a tu lado siempre y que nunca me vaya – le miré detenidamente a los ojos. Algo me decía que tenía razón
-He dicho que ni hoy ni nunca – el volvió a reír y después le abrí la puerta. Me miró de arriba abajo y después se lamió los labios. Le cerré la puerta y oí como al otro lado de la puerta oía un “Buenas noches princesa” reí y le grité un “Piérdete Bieber” oí su risa y después no volví a oir nada más.
La una y media de la madrugada, estaba sola en casa y no podía dormir. No conseguía sacarme al niñato ese de la cabeza. Suspiré dos o tres veces, recibí un mensaje de Vane : Mañana tienes el día libre. Recuerda que el Miercoles tienes ensayo por la mañana del tour y por la tarde tienes que asistir a los TCA’s. Buscate un acompañante, o mejor, invita a Bieber. Al terminar de leer el mensaje reí, Enserio creía que iba a invitarlo? Ni aunque fuera el último ser humano en la tierra
Nuevo día, 9 y media de la mañana, Los rayos de sol se cuelan por mi ventana y me dan de lleno en los ojos. Me froto los ojos y suelto un pequeño gruñido. Día libre.*Llamada entrante de Tito Scooter* descolgé.
-Tengo el día libre, así que no me pides que vaya a ver al imbécil ese – noté su risa desde el altavoz del teléfono
-Solo quiero que vengas a mi casa, voy a organizar una comida y Vane y Beyonce van a venir
-Comida de negocios?
-Venga _____, tengo piscina. Además, no estás obligada a besar a Justin
Al final acabé cediendo. Me puse el bikini y ropa cómoda. Sé que va a ir Justin y como sé que a él le gusta jugar conmigo diciéndome que me quiere, yo también voy a empezar a jugar con él. A partir de ahora, querido Bieber, el que se va a ver obligado a enamorarse de mi vas a ser tú.
Llegué a casa del tío Braun. Le saludé. No me apetecía estar con los demás y que empezaran a realizar comentarios sobre la supuesta relación entre Justin y yo. Así que esquivé totalmente el tema y me fui a la piscina sola. Me eché un poco de crema para protegerme del sol y me metí de cabeza en la piscina mientras dejaba llevarme por el agua para que ella se llevara todos mis pensamientos
Salí a la superficie después de bucear un poco, solté el aire y me eché mi pelo a un lado mientras miraba el sol, hacía un tiempo precioso hoy. De repente noté unas manos en mi cintura
-No puedes ir provocándome de esa forma siendo tan sexy en bikini – para mi sorpresa era Justin
-Estaba intentando esquivarte, que haces en la piscina? – el río. Llevaba un bañador azul de cuadros con el torso descubierto. Dios, tenía un cuerpo increíble. Desvíe la mirada al instante, no quería que el dijera nada
-Quería estar con mi novia. Recuerda, delante de todos ellos tu y yo somos novios – Salí de la piscina y me tapé con la toalla para ponerme en una hamaca cerca de la piscina. En seguida vi como Justin estaba en el borde de la piscina
-Venga, báñate un poco más conmigo
-Ni loca Bieber
-Quieres entrar por las buenas o por las malas?
-Por ninguna de las dos
-Eso me da a entender que por las malas – salió de la piscina. Dios, el agua chorreando de su cuerpo, todo su pelo mojado y esa sonrisa que tanto me encantaba, todo en conjunto, conseguía matarme
-Como se te ocurra tocarme mojado… - me interrumpió
-Que me vas a hacer, señorita _____? – dijo acercándose peligroso cada vez más y más a mi
-Cosas malas, muy malas – el río mientras no paraba de acercarse a mi
-No tengo miedo. Me quieres demasiado como para hacerme algo malo
-O es al revés? Porque el que ha dicho que me quiere has sido tú – noté como se ruborizaba. Sonreí victoriosa y me levanté de la hamaca para empezar a acercarme a él. Quería juego? Pues lo iba a tener
-Yo quererte? Demasiado – dijo con una sonrisa
-No te creo para nada, sé que te gusta jugar, y no voy a caer. Es más, quien vas a caer eres tú
-Yo? Enamorarme de ti? – asentí, el empezó a reir. Se acercó peligrosamente a mi y me cogió de la cintura, me estremecí y se acercó a mi oído – Si supieras todo lo que no sabes, no hablarías – me separé bruscamente de él
-Que dejes de jugar conmigo Justin, que no vas a conseguir nada – otra vez empezó a acercarse a mi, yo estaba tocando prácticamente el borde de la piscina. De momento, me iba ganando
-Y si no quiero jugar contigo? Y si te quiero de verdad pero no me crees?
-Demasiada coincidencia todo…
-Y si me dejas demostrártelo? – me dijo ya prácticamente rozando mis labios. Miré detrás mia, caer a la piscina era seguro si intentaba apartarme. Mierda, me tenía totalmente atrapada
-Demostrarme qué?
-Que te quiero
Punto muerto, de no retorno de o pasa o pasa. De no poder evitar algo, de que sabes que tiene que pasar si o si. De que sus labios van a rozar los mios de nuevo, aunque pretenda evitarlo, es imposible. Pero _____, vuelve al mundo real. Sonreí y me acercé a su oído
-De momento vas ganando, ahora estaremos en empate – me acerqué a sus labios tentándolo a besarme. Oh, esto iba a ser divertido. Sonreí, me giré y con un leve empujón lo tiré al agua. Empecé a reir como una niña pequeña mientras el estaba en el agua. Me miró con mala cara y me tiró con él. Le hice una aguadilla y él nadó detrás mia mientras intentaba huir. Me cogió de la cintura y empezó a acerme cosquillas. Le rogaba que parase, pero el no paraba de hacerme cosquillas. Es curioso que hasta debajo del agua tenga cosquillas.
-Por favor Bieber, para – dije mientras no paraba de reír
-Solo si me das un beso – le miré con mala cara, el me sonrío
-Justin, mi amooooooooor! – una voz femenina nos interrumpió. Me separé de Justin, el miró a la chica, salió de la piscina y corrió a abrazarla. “MI AMOR?” Claro que había estado jugando conmigo todo este tiempo, y esto era la prueba
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